Cómo despertar tu gen emprendedor con la virtualidad
La mayoría de consumidores globales optará por el comercio electrónico para las fiestas de fin de año.
La mayoría de consumidores globales optará por el comercio electrónico para las fiestas de fin de año.
Involucrar la fuerza motora de los individuos para crear una solución en una organización puede ser muy interesante. En esta edición, te cuento tres parejas ideales entre ambos.
Pacho Riva es socio gerente de Mercado Pax Argentina, un espacio que busca difundir conciencia a través del mercado, comercializando productos de emprendedores y artesanos. "La conciencia colectiva aún no está familiarizada con la reducción del consumo y el impacto que este tiene", señala en esta breve entrevista.
Generalmente se piensa el emprendimiento dentro de una empresa, pero también hay dentro de gobiernos, organizaciones sociales u organismos internacionales.
Víctor Valle, Managing Director de Google Customer Solutions para Hispanoamérica, destaca que aún muchos pequeños empresarios carecen del conocimiento necesario en el uso de herramientas tecnológicas. "El principal desafío para las pymes es reinventar los negocios en el corto plazo", señala.
Según una encuesta hecha a 500 startups, el 60% de estás reorientaron sus esfuerzos durante la crisis por el COVID-19 para generar un impacto positivo en la sociedad. Por eso, junto a la organización Mayma pensamos 5 claves para convertirse en emprendedores con impacto.
Antes de la pandemia, el 46% de los argentinos dedicaba entre un 5% y un 10% de su salario a la vestimenta. Hoy el consumo cambió y las marcas intentan adaptarse.
Algunos encontraron en la cuarentena una fuente de inspiración para emprender: tres proyectos que nacieron en medio de este contexto.
Contaron sus experiencias en un encuentro que reunió en Buenos Aires a empresarios sociales de América Latina con inversores y líderes de negocios. Intercambiaron historias de éxito, aprendizajes y estrategias para mejorar la inclusión y el cambio social.
La mayoría de sus alumnos son de familias campesinas pobres y están becados. En la escuela aprenden a producir queso, leche y panes. Y hasta tienen un hotel. Al año, facturan US$ 700 mil, por lo que no necesitan de ningún subsidio estatal. El modelo, que propone que los jóvenes se transformen en emprendedores, es estudiado por varios países del mundo.