Los estudios demuestran que las familias que cenan juntas en casa son más felices y más sanas. Los beneficios aumentan con cada comida, por lo que cuantas más veces se reúna en familia, mejor. Recuerde, la mesa familiar no es solo para la cena: tiene 16 oportunidades por semana (dos comidas los días de semana, tres los fines de semana) para conectarse en una comida tradicional y siempre puede reunirse en la mesa para una merienda o un postre. Aquí hay algunas estrategias simples para aumentar el tiempo que pasa en la mesa familiar.
MANTENLO SIMPLE. Date un descanso. Las comidas familiares no tienen que parecer una pintura de Norman Rockwell. "Creo que la magia puede suceder sin la perfección", dice Lynn Barendsen, directora ejecutiva del Proyecto de cena familiar en la Escuela de Educación de Harvard. "Vengan juntos y disfruten de la compañía de cada uno y logren tener una excelente comida. Se trata de crear el espacio para dejar que suceda ".
EMPIEZA PEQUEÑO. No intente pasar de una o dos comidas a la semana a siete comidas todas las noches. Analice el horario de su familia para la semana e intente encontrar una sola hora de comida que funcione para su familia. Hágales saber a todos y agregue sus planes a los calendarios de todos los adultos y adolescentes de la casa.
ESTABLECE UNA META. No trates de hacer todo de una vez. Mira a tu familia y decide cuáles son tus necesidades. Si es más tiempo en la mesa familiar, intente encontrar una comida adicional que funcione. Si tienes niños que son delicados, enfócate en estrategias para ayudar a todos a comer de manera más saludable. Si su problema es la tensión en la mesa de la cena, concéntrese en los temas de conversación y los juegos para mantener a todos contentos y comprometidos.
SE FLEXIBLE. Si ambos padres no pueden estar en casa a la misma hora para la cena, o si las prácticas deportivas de los adolescentes se interponen, planifique su tiempo de mesa para más tarde en la noche alrededor de un refrigerio familiar o un postre.
MANTENLO DIVERTIDO. La mesa familiar debe ser un espacio divertido y acogedor. No es un lugar para el estrés, las discusiones o interrogar a los niños sobre sus calificaciones.
QUEDATE EN CASA. El tiempo en familia en un restaurante es mejor que el tiempo sin comida familiar. Pero la realidad es que las comidas que se consumen fuera del hogar casi siempre son menos saludables.
© 2019 The New York Times