Personas privadas de su libertad abrieron un restaurante dentro de la cárcel y reciben el apoyo de víctimas de delitos
Punto de Paz funciona en la prisión de máxima seguridad del penal de Batán, en Mar del Plata y además de trabajo ayuda a “la restauración” de los internos y a “recuperar la dignidad”, en palabras de los protagonistas. Es una iniciativa de la Cooperativa Liberté, que integran quienes cumplen una condena con acompañamiento de Víctimas por la Paz, una organización de personas que fueron afectadas por delitos. “Lo opuesto de la inseguridad es la convivencia”, propone una de ellas.