El Ministerio de Educación de CABA sentó posición sobre el tema con un ojo puesto en las elecciones de 2023. Igual que con la vuelta a la presencialidad en las escuelas, Rodríguez Larreta le hace un guiño al electorado de derecha. Todo suma.
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Juntes. Hace unos días, el ministerio liderado por Soledad Acuña emitió una resolución que establece que “los/as docentes (…) deberán desarrollar las actividades de enseñanza y realizar las comunicaciones institucionales de conformidad con las reglas del idioma español, sus normas gramaticales y los lineamientos oficiales para su enseñanza”. Para más detalles, la misma norma elimina toda ambigüedad sobre el tema aprobando una serie de “guías de recursos y actividades” sobre el uso la lengua de Cervantes en las escuelas.
Casi inmediatamente, la ministra Gómez Alcorta deploró la medida, docentes de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA manifestaron su repudio, los medios progresistas la tildaron de “regresiva”, y el Frente de Izquierda presentó proyectos en la Legislatura para dejarla sin efecto por considerar que “no obedece a razones pedagógicas, es discriminatoria y viola el derecho a la libertad de expresión”. Todo muy esperable. Igual que el debate en Twitter, que sembró vientos y todavía hoy cosecha tempestades.
Independientemente de que, según todas las encuestas, las prioridades de la gente son otras –inflación, inseguridad, corrupción– el lenguaje inclusivo tiene su interés en el debate público y los políticos lo saben:
- Las palabras importan. Antonio Gramsci lo descubrió hace casi cien años: la revolución no acaba de concretarse nunca si no se cambia la mente de los pueblos. El futuro es de quien tenga más éxito en poblar de ideas (también de prejuicios) las conciencias de los ciudadanos. Y para eso, el lenguaje es la clave. Por eso sí es relevante si en las aulas hay alumnos o alumnes.
- El adversario importa. Dime a qué –o a quién– te opones y te diré quién eres. En política, nada define tanto la identidad de un grupo como su adversario. Por eso el alineamiento en bandos es funcional para todos: progresistas nac&pop que defienden el lenguaje inclusivo, contra liberales, conservadores y republicanos que prefieren el castellano de la Real Academia, que “limpia, fija y da esplendor”.
- La oportunidad importa. Los tiempos preelectorales obligan a marcar la agenda y diferenciarse. Termina la fase arquitectónica de la política, diría Aristóteles, y empieza la agonal. Rodríguez Larreta, moderado histórico, sale ahora a la conquista del electorado que mira con afecto a Bullrich, Macri o Milei. Por eso se juega. La coalición del gobierno, a su vez, reacciona para capturar la sensibilidad progresista que simpatiza con la izquierda. Todos ganan.
Un pequeño episodio de una serie que recién empieza. Se llama Elecciones Presidenciales 2023. Los apasionados de la política se aprovisionan de pochoclos y se acomodan en sus sofás frente a la tele. Entretenimiento para todos y todas. Y todes.
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Tres preguntas a Vanessa Van Edwards. Es una investigadora estadounidense, especializada en bases científicas de la conducta humana y lenguaje gestual. Lidera Science of People, un laboratorio de conducta humana en Portland, Oregon, donde estudia temas relacionados con el carisma, la influencia y el poder del lenguaje corporal.
- ¿Qué hace que algunas charlas o conferencias sean enormemente populares y otras no?
Mi equipo y yo nos interesamos en entender por qué algunos TED Talks se vuelven virales y otros no. Analizamos miles de horas de TED Talks, evaluando lenguaje gestual, tonos de voz, ropa de los speakers y otras variables. Buscábamos un patrón, una constante. Cuando se le pregunta a la gente qué es lo primero que uno mira de otro, tienden a decir que es la cara, pero en realidad son las manos. Y eso viene desde la época de las cavernas: queríamos saber rápidamente si el otro traía una piedra o algo de comida. Queríamos saber si era amigo o enemigo, si estábamos o no seguros. Si ponemos las manos atrás, quien nos escucha empieza a ponerse incómodo, y eso se acentúa hasta que las mostramos. Si no vemos las manos, no podemos ver las intenciones.
- ¿Qué tienen en común los speakers más populares?
Los gestos, definitivamente. En promedio, los speakers más populares, hacen un promedio de 465 gestos con las manos en 18 minutos. Y los menos populares, tienen un promedio de 272 gestos al mismo tiempo. Cuando los gestos acompañan las palabras, lo que entiende la audiencia es que el speaker conoce su mensaje muy bien: es capaz de hablar en dos carriles diferentes. Puede hablar con palabras, y puede además explicar sus conceptos con sus manos. El cerebro atribuye 12.5 más peso a los gestos que a las palabras, por eso lo que decimos con ellos determina lo que dijimos con las palabras.
- ¿Qué quiere decir que somos “contagiosos”?
Que podemos “infectar” a otros con nuestros sentimientos. Somos contagiosos, especialmente con otros humanos que envían y reciben signos de lenguaje gestual. He hecho la prueba: me paré en la calle a mirar hacia arriba con atención (en realidad no miraba nada) y poco a poco se reunió un buen grupo de gente a mi alrededor, haciendo lo mismo. Podemos generar emociones, y luego buscamos la racionalidad de esas emociones. Hay siete microexpresiones en nuestros rostros que se repiten en el mundo sin importar raza ni género. La expresión del miedo nos ayuda a estar seguros: abrimos los ojos grandes para ver cuál es el camino de escape, y abrimos la boca para tomar oxígeno. Ponemos esa cara antes de darnos cuenta de que tenemos miedo, y eso nos prepara para luchar, pedir ayuda o huir. Lo interesante de las expresiones faciales es que causan nuestras emociones: la cara triste nos entristece y la sonrisa contribuye a alegrarnos.
Las tres preguntas a Vanessa Van Edwards se tomaron de la presentación You are contagious, dada originalmente en el contexto de TEDxLondon. Para acceder a la charla completa, podés hacer clic acá.
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SEO. Uno de los mayores desafíos, cuando se genera contenido para que habite en la red, es hacerlo atractivo no sólo para la inteligencia humana, sino también para la artificial. Además de programar los websites respetando la alquimia que sólo conocen los iniciados, está al alcance de cualquiera googlear un determinado tema, revisar los aspectos que cubre, aplicarles herramientas especializadas como Semrush y determinar cuáles son las palabras que mejor ranquean. Este artículo de Tony Patrick entra en detalles sobre cómo optimizar el contenido para, desde el momento mismo en que se genera, resulte atractivo para los buscadores.
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Academia. La provincia canadiense de British Columbia publica Words Matter, una guía para el uso del lenguaje inclusivo en los lugares de trabajo. Comienza definiendo al lenguaje inclusivo de una manera interesante: “es un lenguaje libre de palabras, frases o tonos que reflejen prejuicios, puntos de vista estereotipados o discriminatorios de personas o grupos particulares. También es lenguaje que hace no excluir deliberada o inadvertidamente a las personas de sentirse aceptadas”. Y completa: “El lenguaje juega un papel importante en la promoción de un mayor compromiso de los empleados, mejor servicio al cliente y mayor productividad: todos los aspectos importantes de una cultura laboral positiva”. Interesante manera no confrontativa de plantear el tema.
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Oportunidades laborales
The Walt Disney Company abre una búsqueda de Manager Publicity Theatrical & DDS. LINK.
Visa mantiene su búsqueda de Senior Director, SoCo Government Engagement. LINK.
Sigue abierta la búsqueda de Director, Government Affairs and Public Policy, Spanish Latam para Google. LINK.
Hasta acá llegamos esta semana. Todas tus ideas, propuestas o consultas son bienvenidas. Podés escribirme a comms@redaccion.com.ar
¡Hasta el miércoles que viene!
Juan
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