Qué pasó. El último informe del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) muestra que la cantidad de pobres multidimensionales aumentó del 26,6% al 31,3%, del 2017 al 2018, lo que implica que hoy existen 12,7 millones de personas con carencias importantes en su vida. Además de medir la pobreza por ingresos, el índice considera carencia de derechos básicos como la educación y el acceso a la alimentación. Es el índice más alto desde 2010, cuando se empezó a hacer la medición.
Algunas cifras que llaman la atención del informe:
- 6 de cada 100 hogares urbanos y casi el 7,8% de la población experimentan experiencias frecuentes de hambre (medida como "inseguridad alimentaria"). La problemática se asemeja a la crisis de 2009.
- La pobreza estructural multidimensional saltó de 16,7% en 2017 a 18,6% en 2018. Este índice representa al porcentaje de personas que es pobre por ingresos y presenta además 3 o más carencias de derecho social.
- 1,7 de cada 10 hogares no logran cubrir sus necesidades básicas de salud. En esos hogares vive el 22% de la población urbana. La situación ha empeorado con la crisis.
- El mayor impacto se ve en el Conurbano bonaerense, donde la pobreza multidimensional alcanza al 40% de la población. Allí, la pobreza estructural multidimensional también aumenta al 25%.
El impacto del ajuste y la recesión. El dramático aumento de la pobreza tuvo lugar en un contexto que reflejan la inflación, la caída de la actividad, el aumento del desempleo y la incertidumbre por el dólar, que tienen al país empantanado en una dura recesión.
“Esta tendencia se explica principalmente por el deterioro de los ingresos de los hogares que no eran pobres por ingresos pero se encontraban en situación vulnerable en relación a las dimensiones de derechos consideradas”, dice el informe de la UCA.
En 2018 más de una de cada tres personas vivía en hogares sin ingresos por empleos registrados en la seguridad social o jubilaciones o pensiones contributivas, o que en su defecto contaban con al menos un componente en situación de desempleo de larga duración.
Qué es la pobreza multidimensional. El índice de la UCA cruza la medición de pobreza por ingresos, medida por el INDEC, con un análisis basado en las carencias de derechos que incluye seis dimensiones (alimentación y salud, servicios básicos, vivienda digna, medio ambiente, accesos educativos y empleo y seguridad social). El objetivo es dar una mirada más completa de la pobreza, no solo enfocada en el nivel de ingresos de una familia.
No todo es negativo:
- En 2018 hubo una mejoría en el acceso a servicios básicos de la vivienda, donde se registra una tendencia sensible a la disminución desde 2010. Sin embargo, 3 de cada 10 hogares urbanos siguen sin contar con red de cloacas, y 1 de cada 10 hogares urbanos no cuenta con servicio de red de agua potable.
- La mejora observada se debe a la expansión en las conexiones a red de agua potable y a la red cloacal. El informe dice que esto se debe a la inversión pública que tuvo lugar entre los años 2010 al 2014 y posteriormente entre 2016 y 2018. O sea durante el último periodo del Gobierno de Cristina Kirchner y los primeros años del mandato de Mauricio Macri.
- Otro de los índices que muestra una leve mejora es el del medio ambiente, que bajó un punto porcentual entre 2017 y 2018. Este índice toma en cuenta la cantidad de hogares sin recolección de residuos y basurales, la presencia de fábricas contaminantes, y espejos de agua contaminados.
- Los hogares que se encontraban privados en al menos una dimensión pasaron del 66% al 62%. Los con 2 y más carencias pasaron de 44% en 2010 a 42% en 2018 y los que experimentaban 3 carencias y más registraron un descenso de 3pp. pasando del 29% al 26%.
A pesar de estas mejoras, el informe destaca esta tendencia tiende a equilibrarse con el deterioro experimentado en otras dimensiones de derechos fundamentales, como alimentación y salud o trabajo, y con el deterioro del salario en términos reales.
El ángulo político. En el Gobierno temen el impacto electoral de las cifras ya que Mauricio Macri había pedido que se juzgara su gestión por este indicador: “si cuando finalice mi gestión no bajó la pobreza, habré fracasado". La Casa Rosada ya se resigna a que no podrá exhibir cifras positivas de cara a las elecciones de octubre.
El informe de la UCA dice que “durante el último año, los más empobrecidos han sido los sectores obreros y las clases medias bajas”.
Lo que se viene en la semana. El informe negativo de la UCA se publica en una semana en que el Gobierno también tendrá que lidiar con las cifras de pobreza que publicará el jueves el INDEC, que mide solo los ingresos. Además, dará a conocer datos sobre la canasta básica, compras en supermercados y shoppings.