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Llega la tercera edición especial de PLANETA en la cuenta regresiva para la conferencia climática. El tema de hoy pasa desapercibido para algunos países, con mayor o menor intención en esa desatención. Para otros, reclamar por este tema en la agenda de negociaciones equivale a pensar en una supervivencia más justa en un mundo cada vez más caliente. Hoy conversamos sobre pérdidas y daños.
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Loss & Damage. Pérdidas y daños. Este es el tema que hoy nos convoca y que será -o debiera ser- uno de los temas centrales en la mesa de discusión de la próxima Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Menos técnico que los dos temas que vimos en las semanas anteriores -artículo 6 y financiamiento-, pero también menos político al menos hoy en las negociaciones, lo que repercute negativamente en su avance. Un tema de importancia para la supervivencia de algunos y de un interesado desinterés para otros.
Para comprender los avances que este tema requiere en la COP26, primero debemos conocer de qué hablamos cuando hablamos de pérdidas y daños.
- ¿Qué son los daños y pérdidas? La Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres (LSE) explica que los eventos climáticos extremos pueden causar pérdidas y daños a la sociedad humana, la infraestructura y el ambiente natural. Se trata de impactos que ocurren por una combinación del cambio climático antropogénico y la variabilidad climática natural. El cambio climático incide en las variables de las que dependen sequías, olas de calor, incendios, precipitaciones intensificándolas y, por lo tanto, haciendo que sus efectos sean cada vez más destructivos.
Estas pérdidas y estos daños no se refieren únicamente a lo económico. Por el contrario, estamos hablando de la destrucción completa de una vivienda, de cómo dañan la salud humana, de cómo afectan de forma irreversible una producción agrícola. La LSE describe que son impactos que incluyen daños a la salud humana y la movilidad, la pérdida de acceso al territorio, patrimonio, tradiciones culturales y conocimientos indígenas y locales; y daños a la biodiversidad y los hábitats. En síntesis. No es algo del futuro. Es lo que ya estamos viendo con los efectos del cambio climático, ocasionado por nosotros.
- ¿Es lo mismo que adaptación al cambio climático? No. Cuando hablamos de adaptación nos referimos a una etapa anterior a pérdidas y daños. Se trata de tomar políticas, medidas, acciones para adaptarse a los efectos ya presentes del cambio climático. Adaptarnos ante el cambio climático debiera contribuir a disminuir las pérdidas y los daños.
La LSE explica que las pérdidas y los daños pueden ocurrir cuando se alcanzan los límites de adaptación porque las acciones son inasequibles, no son física o técnicamente posibles, son socialmente difíciles o simplemente no son suficientes para prevenir algún daño a los seres humanos y al ambiente. Las pérdidas y los daños también pueden ocurrir allí donde la adaptación no se ha implementado de manera óptima.
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¿Cómo se viene trabajando en pérdidas y daños? Desde ya el interés, el reclamo y la mayor preocupación viene de los países en desarrollo, que coinciden con ser los más vulnerables ante el cambio climático -algunos más que otros- y que no tienen las condiciones económicas necesarias para afrontar los costos que implican las acciones necesarias. Esto se ha llevado históricamente a la mesa de las negociaciones climáticas.
En la COP13 de 2007 se inicia el proceso de considerar los medios para afrontar pérdidas y daños. Fue recién en la COP19 de 2013 que se estableció el Mecanismo Internacional de Varsovia para las pérdidas y los daños. ¿De qué se trata? Busca hacer frente a las pérdidas y los daños relacionados con el cambio climático en los países en desarrollo. Para ello, el mecanismo tiene tres funciones concretas: mejorar el conocimiento y la comprensión del riesgo ante eventos vinculados con el cambio climático, fortalecer el diálogo entre las partes interesadas, e intensificar las medidas de apoyo para que los países puedan hacer frente a las pérdidas y los daños.
Esa ayuda incluye financiamiento, tecnología y fomento de la capacidad local.
En las COP siguientes se fue delineando el trabajo del Mecanismo y de su Comité Ejecutivo. En la última COP25 de 2019, celebrada en Madrid, España, se creó la Red de Santiago para promover y facilitar la asistencia técnica de organizaciones y expertos a los países más vulnerables y afectados por el cambio climático. Recibir esa asistencia les permitiría mejorar su capacidad de respuesta. Lo que quedó pendiente en el debate o que protagonizó las críticas en aquella COP fue la falta de avances en materia de gobernanza, financiamiento y responsabilidad de los países desarrollados respecto a daños y pérdidas. El país que más se opuso en ese momento a daños y pérdidas: Estados Unidos (bajo la administración de Donald Trump).
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¿Qué debería pasar con daños y pérdidas en la COP26? No una sino varias cosas. Para dar respuesta a este interrogante conversé con Laura Schäfer co-coordinadora del Grupo de Trabajo de Adaptación y Pérdidas y Daños de CAN Internacional y senior advisor en Germanwatch, quien nos comparte los tres puntos clave sobre los cuales se debiera avanzar en Glasgow.
- Que pérdidas y daños sea un ítem permanente de la agenda de la COP. "Hasta ahora, se viene trabajando a nivel técnico. Necesitamos una sala política, no sólo una sala técnica", argumenta Laura quien xx. Este pedido busca que pérdidas y daños sea un tema permanente a trabajar tanto en las distintas conferencias de las partes como en los órganos subsidiarios.
- Que se adopte una decisión respecto de la Red de Santiago. La Red De Santiago fue establecida en Madrid, pero no hubo una decisión sobre cómo implementarla", explica Laura y enfatiza: "Necesitamos que ahora se operacionalice (que se ponga en práctica)". Para ello, la experta recuerda que la red necesita financiamiento para su puesta en práctica, a fin de poder direccionar la ayuda en capacidad.
- Que se trabaje en el financiamiento para pérdidas y daños. "Éste viene siendo un pedido de los países vulnerables desde hace mucho tiempo. En algunos casos ya no es posible limitar las pérdidas y daños y hay que ayudar a las personas que ya están expuestas a ellos. Esta COP debe dar lugar a un nuevo espacio para el financiamiento sobre daños y pérdidas", cuenta Laura. El pedido busca que la nueva meta de financiamiento que se tendrá que empezar a movilizar en 2025 destine una parte a pérdidas y daños: "La arquitectura financiera necesita expandirse para poder incluir las pérdidas y los daños".
Respecto de que en las negociaciones muchos países pelean entre sí por quién tiene mayor condición de vulnerabilidad para recibir ayuda, Laura explica que debiera avanzarse en la realización de reportes que muestren la situación de los países y sus necesidades para así poder juntar las necesidades existentes y promover la movilización de la ayuda requerida.
¿El mayor desafío que ve Laura para lograr estos avances? Que los países desarrollados no ven por completo la necesidad de proveer soluciones ante este problema y mucho menos de hacerlo en la velocidad necesaria.
¿Es tarde para trabajar en adaptación y debemos poner más el foco en acciones ante pérdidas y daños? Laura responde con un rotundo no: "No creo que sea tarde para la adaptación. La prioridad debiera seguir haciendo hacer la mayor mitigación y adaptación posible para minimizar las pérdidas y los daños. Y hacerlo de la manera más efectiva y rápida posible. El problema es que ya nos encontramos en un estadio de calentamiento global en que las acciones de mitigación y adaptación no serán suficientes para prevenir todas las pérdidas y todos los daños. Ya no es posible. Daños y pérdidas debiera recibir la misma atención que la mitigación y la adaptación para no dejar solas a esas personas que hoy más sufren los impactos del cambio climático".
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Dos lecturas para tener en el corcho durante las próximas semanas. Pues sí. Quiero que me acompañen con toda la energía y buen conocimiento durante la cobertura de la COP26.
Así que les recomiendo tener a mano estas dos guías especiales que preparamos en RED/ACCIÓN. Recomiendo leerlas en el siguiente orden: una primera guía sobre qué es el cambio climático y una segunda guía sobre qué es la COP. Si consideran que hay más interrogantes que responder en las guías, no duden en escribirme a planeta@redaccion.com.ar así las seguimos enriqueciendo con contenido. Y desde ya, es más que bienvenido si quieren compartirlas en sus redes sociales para que más personas se informen.
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En agenda: un taller y un documental. El Taller de Cobertura de la COP26 se los comenté la semana pasada, ya tuvo su primer encuentro y mañana, jueves 21 de octubre, tendremos el segundo. En esta segunda oportunidad, quien les habla profundizará en herramientas prácticas para conocer y comprender cómo cubrir la COP26, aún si se encuentran a la distancia. Pueden anotarse gratis para participar aquí. Recomiendo que, si les interesa, lo hagan cuanto antes, así reciben el link del encuentro.
Luego de dictar el taller mi cabeza ya se pondrá 100% en modo viaje y en la finalización de sus respectivos preparativos. Así que si tuviera que elegir una producción audiovisual durante las largas horas de vuelo de Buenos Aires a Londres, definitivamente elegiría la serie Nuestro Planeta (Our Planeta) para, con la extraordinaria voz y maravilloso trabajo de David Attenborough recordar por qué en la COP hay que avanzar y no retroceder en la acción climática. Pueden disfrutar los ocho capítulos de la serie en la plataforma digital Netflix.
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Qué emoción que, después de 22 meses, me esté despidiendo de una newsletter diciéndoles que la próxima edición ya me encontrará del otro lado del lado del océano para cubrir una conferencia climática. Llegaré bastante antes de la conferencia porque se suponía que tenía que hacer cuarentena y ahora eso cambió. Así que estaré trabajando la próxima semana desde una de mis ciudades más queridas, Londres, en lo que será la última semana en la cuenta regresiva para la COP26.
Hisopados, barbijos, mucha documentación, alcohol en gel y valija mediante, ¡nos reencontramos el próximo miércoles en PLANETA! Sigan las redes sociales de RED/ACCIÓN que habrá sorpresas 🙂
Tais